El ingente trabajo de miles de bomberos forestales y las lluvias de los últimos días han dado prácticamente por finalizada la oleada de incendios que ha asolado el centro y el tercio norte de Portugal en la última semana.

Aunque aún quedan algunos focos activos, la gran mayoría de los incendios forestales se encuentran extinguidos o controlados en los últimos días. En concreto, según el Sistema Europeo de Información sobre Incendios Forestales (EFFIS), que ofrece el Servicio de Vigilancia Atmosférica de Copernicus, actualmente apenas quedan incendios activos en Portugal.

¿Cuál ha sido el impacto de los incendios de Portugal?

Los incendios forestales de este mes de septiembre de 2024 en Portugal dejan un balance de 7 fallecidos, entre los que se encuentran personal civil, vecinos y bomberos. Además, hay cientos de desalojados por el humo y más de 100.000 hectáreas afectadas por el fuego en un centenar de incendios en menos de 10 días, según las estimaciones ofrecidas por EFFIS.

La base de datos nacional de incendios, a fecha de 1 de septiembre, señalaba que hasta esa fecha sólo se habían quemado unas 10.000 hectáreas, un 86 % menos de superficie quemada respecto a la media del decenio. No obstante, la situación ha cambiado por completo en los primeros días de septiembre, multiplicando por 10 la superficie quemada por las llamas.

Esta serie de incendios forestales en el norte de Portugal comenzó alrededor del 10 de septiembre y aumentó significativamente su actividad entre el 15 y el 17 de septiembre. Durante esos días, se contabilizaron 107 incendios activos simultáneos que obligaron a la movilización de más de 4.000 bomberos.

Apoyo internacional en la lucha contra el fuego

Además, Portugal ha recibido ayuda de otros países europeos, especialmente de España, que desplazó a la Unidad Militar de Emergencias (UME), algunas Brigadas de Refuerzos de Incendios Forestales (BRIF) del Ministerio de Transición Ecológica, y medios aéreos como los aviones anfibios Foca, capaces de arrojar cerca de 10.000 litros de agua sobre las llamas.

Causas climáticas y condiciones meteorológicas

La gran mayoría de estos incendios se han concentrado en el centro y norte de Portugal. Estas regiones se han visto afectadas en las últimas semanas por una anomalía climática extrema, con altas temperaturas y fuertes vientos desecantes. Estas condiciones han favorecido la rápida propagación del fuego.

De hecho, el 14 de septiembre de 2024, los servicios satelitales capturaron las enormes columnas de humo provocadas por los incendios forestales en Portugal.

Consecuencias ambientales de los incendios de Portugal

Los incendios de Portugal en 2024 han tenido otras importantes consecuencias más allá de las llamas. El Servicio de Vigilancia Atmosférica de Copernicus (CAMS) estima que los incendios forestales en Portugal ya han liberado el nivel más alto de emisiones de carbono para un mes de septiembre desde que hay registros.

«Las emisiones totales estimadas de carbono, utilizadas como indicador de la intensidad de los incendios, alcanzaron 1,9 megatoneladas de carbono hasta el 18 de septiembre. Esto se compara con el máximo anterior de 1 megatonelada registrado en septiembre de 2003», explican desde Copernicus.

Asimismo, las columnas de humo han afectado al norte de la península Ibérica y al oeste de Francia, aunque las borrascas de los últimos días han contribuido a su diseminación.

Tras este trágico balance, las autoridades lusas declararon el 20 de septiembre como día de luto nacional en honor a las víctimas de los incendios. También se declaró el estado de calamidad en los municipios más afectados.